Por: Pedro Uribe (@pedrouribech)

A propósito del 'Caso Lapadula' en nuestro país, existen otro ejemplos similares al del atacante ítalo-peruano. No es algo descabellado decirle 'no' a una selección para esperar otra. Pasó a lo largo de la historia y en estos tiempos es más común de lo que se cree.

El fútbol avanzó tanto que es casi imposible desligarlo de factores tecnológicos que van de la mano hacia una mejora integral. Pasa con las estadísticas, las mediciones y también con el scouting. La competencia es tan ardua que las selecciones "inferiores" no pueden darse el lujo de prescindir de algunos elementos que podrían sumarle mucho a su poderío.

En América hay más de un ejemplo. Uno bastante significativo para el fútbol mexicano es Christian 'El Chaco' Giménez. El enganche argentino debutó en Boca Juniors en el año 1998. Tras algunas temporadas en el fútbol argentino, Giménez recaló en el Veracruz. Su verdadera carrera arrancó en México, y es que jugó desde el 2004 hasta el 2018 en dicho balompié.

'El Chaco' no era uno más. Se había ganado el respeto y la admiración de la afición generalizada en el país norteamericano. Se hablaba de su nacionalización para jugar por el 'tricolor'; sin embargo, Giménez mantenía viva la ilusión de jugar por Argentina. La oportunidad nunca llegó y la Federación Mexicana de Fútbol no desistió hasta que en el 2013, Christian se puso la camiseta verde y debutó ante Costa de Marfil en un amistoso.

Precisamente el país africano es otro de los protagonistas. Wilfried Zaha nació en Costa de Marfil; sin embargo, se crio y creció en Inglaterra. Con 12 años de edad, Zaha ya era parte de las inferiores del Crystal Palace, club donde se desempeña actualmente en la Premier League.

En el 2012, dos años después de su debut oficial, Roy Hodgson lo convocó para la Selección Inglesa que debía afrontar un amistoso con Suecia. No obstante, esa fue una de sus pocas opciones con dicha escuadra. Sin haber jugado algún partido oficial con los ingleses, Zaha fue convocado por Costa de Marfil y no lo volvió a dudar. La Copa Africana de Naciones estaba a la vuelta de la esquina y perderse seis jornadas de Premier no sería impedimento para Wilfried.

Finalmente, un ejemplo mucho más cercano se dio en esta parte del mundo. Venezuela, desde hace algún tiempo, empezó a ver el fútbol de manera competitiva. Si bien varios años que viene siendo una selección dura para cualquiera, el trabajo de scouting fue la gran piedra angular en el proyecto del balompié venezolano.

Uno de los casos más recordados es el de Fernando Amorebieta. El excentral del Athletic Club de Bilbao aceptó la convocatoria de la 'Vinotinto' tras varias idas y venidas. Amorebieta incluso tuvo la oportunidad de defender los colores de España en selecciones menores. Aún así, cuando el reloj marcó la hora límite para el defensa, eligió la casaca venezolana.

En el 2008, Vicente del Bosque lo convocó para un amistoso que disputaría España ante Dinamarca. El aguerrido central no llegó a debutar y esa sería su única experiencia con 'La Roja'. Tiempo después, Fernando se encontraba jugando por Venezuela, país donde nació.

"Cuando uno hace su trabajo y le salen las cosas bien puede pasar de todo. Tomé esa decisión y no me arrepiento. Al final, preferí jugar con Venezuela que con España. Fue una decisión acertada. Venezuela tiene un grupo familiar y tengo muy buena relación con todos mis compañeros", declaró el vasco en octubre del 2014.