Tras dejar Bélgica, el español Roberto Martínez fue confirmado como nuevo seleccionador de Portugal
Portugal tiene nuevo entrenador. Luego de la salida de Fernando Santos, quien se consagró campeón en la Eurocopa 2016, la directiva lusa buscó un reemplazo a la altura: Roberto Martínez. El español, quien llevó a Bélgica a semifinales de Rusia 2018, tuvo un duro periodo en la última Copa del Mundo, donde su equipo cayó en primera ronda.
Ahora, con aires de renovación, el también extécnico de equipos ingleses como Everton y Wigan está listo para este gran desafío. Martínez, de 49 años, tendrá a su disposición a -quizá- una de las mejores generaciones en la historia de Portugal, con figuras de la talla de Joao Felix, Bernardo Silva, Rafael Leao, Bruno Fernandes, Ruben Días, entre otros, además de Cristiano Ronaldo.
El contrato del español con la Federación Portuguesa de Fútbol está pactado hasta finales del Mundial 2026 y será su segunda experiencia al mando de una selección.
Las principales declaraciones del español tras asumir el cargo
"Tengo clara la estructura y los roles del cuerpo técnico. La anunciaré en los próximos días. Me gustaría incorporar un ayudante portugués, que haya sido jugador de la selección. Va a ser importante para el cuerpo técnico y nos dará una aceleración para el fútbol portugués. No creo en sistemas. Creo que hay que sacar el talento para ganar partidos", manifestó en conferencia de prensa.
"El portugués se adapta bien a ligas extranjeras. Siempre da un grado competitivo a su equipo. Me ilusiona mucho que el portugués pueda aportar una forma de jugar que sea ganadora y representativa de lo que es el futbolista portugués. Creo en el proyecto, en el jugador portugués y por eso tengo ilusión por cumplir los objetivos", amplió.
Sobre 'CR7': "Las decisiones de fútbol se tiene que tomar en el terreno de juego. No tomo decisiones en despacho. Mi punto de inicio es la lista del último Mundial y Cristiano es jugador de esa lista. Lleva 19 años en la selección y se merece el respeto de sentarnos y hablar. Y mañana hablamos". Dejó la puerta abierta a su continuidad.