La Selección Peruana de Vóley sub 16 también tuvo participación en la última semana. Y es que las chicas dirigidas por Natalia Málaga tuvieron un campeonato en Asunción en el que el resultado fue positivo en líneas generales: quedaron subcampeonas. Sin embargo, el balance para la entrenadora no es del todo bueno, ya que llegaron a la final invictas y cayeron ante Argentina que había perdido dos partidos en su ruta hasta el partido definitorio.

La entrenadora conversó con Movistar Deportes acerca del campeonato y explicó la importancia que tiene jugar este tipo de torneos, pese a que no son reconocidos por la Federación Internacional de Vóley (FIVB).

“Este es un campeonato que se viene realizando bastantes años atrás para estas categorías y es reconocido por la confederación sudamericana para darle un roce internacional a estas categorías que normalmente no tienen campeonatos oficiales. El que sí es oficial es el que viene el próximo año que es el Sudamericano reconocido por la FIVB y te lleva a un Mundial de menores”, explica Natalia.

Sin embargo, para Natalia Málaga el resultado final (derrota ante Argentina) no fue el deseado y la entrenadora se lo atribuye a un problema que parece afectar a todas las categorías de la selecciones de vóley: la cabeza.

“Todo es una parte emocional y un equilibrio mental que les pasa a los mayores y por qué no les va a pasar a chicas de 14 o 15 años que por primera vez se ponen la camiseta de Perú para jugar por un resultado. Argentina creció, a pesar de perder dos partidos y en el último momento les quedó muy poquito tiempo para voltear el marcador”, añadió Natalia.

“No hubo esa reacción rápida, pero no son mejores que nosotros. Se ganó o se perdió y ahora toca seguir trabajando y mejorando. Sobre todo yo, encargada de mi categoría”, agregó la entrenadora.

Eso sí, Natalia Málaga es optimista con el futuro de su selección, pese a admitir que los problemas de una selección de vóley de menores ahora requieren un apoyo mayor en aspectos de los que no se tomaban en cuenta antes y que ahora son trascendentales.

“El problema no es técnico ni físico, se veían bien. Es la parte emocional. Antes no se necesitaba un psicólogo. Ahora, se necesita un psicólogo deportivo. Y ahora no es fácil. Hay 500 niñas atrás que quisieran estar en la misma situación (jugar el torneo) y tenemos 25 en el equipo, pero apenas llevé 14. Yo veo por la actitud. Llevo a la otra”, finalizó.

Mira más estractos de la entrevista con Natalia Málaga en el noticiero #ModoSele de esta noche (9:00 p.m.)